Capitulo 6: El cazador rojo -parte I

El pueblo de Olesia era más bien un pueblo de paso, habían tabernas y hoteles por doquier, puesto que de todos los pueblos y ciudades en los campos externos, se podía llegar fácilmente al reino de Elgrand desde allí, las chicas se detuvieron en los establos, donde pusieron a sus caballos y a Kiru, la carreta fue guardada en un lugar seguro, como ya era de noche, las chicas buscaban un lugar donde descansar, por lo cual caminaron en la calle iluminada por las velas de los faroles, para ser de noche había mucha gente caminando y las tabernas estaban llenas.

-Vaya, está realmente es mi clase de ciudad, podemos ir a una taberna?. –pregunto Niena.

-No tenemos tiempo para eso, vamos a encontrar un hotel, dormir, pararnos temprano mañana, comprar cosas y regresar al camino. –Dijo Jeska.

-No seas aguafiestas, hay que divertirnos de vez en cuando. –Dijo Niena refunfuñando por un momento.

Lilica observo a su alrededor y dijo.

-Parece que no tendremos muchas opciones y al final tendremos que entrar a un bar.
-A que te refieres con eso?. –Pregunto Jeska.

-Todos los hoteles del lugar, tienen bares. –Dijo Isis.

Las chicas se detuvieron un momento y miraron a su alrededor, lo que decía Isis era verdad, luego Agatha dijo.

-Bueno, habrá que buscar uno tranquilo y que no llame mucho la atención.

-Si, somos un grupo de viajeras, así que los hombres se nos podrían acercar. –Dijo Jeska.

-No hay problema, yo sé cómo manejarlos. –Dijo Niena sonriendo.

Las chicas se quedaron paradas con la boca abierta mientras veían a Niena alejarse, luego esta se dio la vuelta y dijo.

-Creo que he encontrado el sitio perfecto.

Niena señalo hacia un hotel que estaba en medio de una concurrida intersección, tenía una altura casi de cuatro pisos, era un buen hotel con una taberna en la planta baja, el nombre del lugar era solsticio.



-No está nada mal Niena. –Dijo Lilica.

-Tengo un sentido especial en cuanto a gustos y estilos se refiere. –Dijo Niena orgullosa.

Las chicas entraron a la recepción, donde un hombre gordo con bigote las saludo.

-Bienvenidas al solsticio, en que puedo ayudarlas?.

-Queremos una habitación para cinco. –Dijo Agatha.

-No hay problema, por cuantas noches?. –Pregunto el encargado.

-Solo esta. –Respondió Jeska.

Agatha saco una bolsa llena de Galeras, el dinero del reino de Eloria.

-Aceptan Galeras?. –Pregunto Agatha.

-Claro que si, serian 150 por la habitación de cinco. –Dijo el encargado.

Agatha pago, él le dio la llave y dijo.

-Disfruten su estadía, el bar está abierto si quieren comer o beber algo.

-Gracias por su hospitalidad. –Dijo Agatha con una reverencia.

Las chicas tomaron sus cosas y subieron por una escalera, luego Niena dijo.

-Las encuentro arriba, voy por un trago.

Agatha suspiro y dijo.

-Yo me quedare con ella, suban las cosas y bajen al bar.

Las chicas asintieron y subieron, pero Jeska se acerco a Agatha y le susurro.

-Ten cuidado, procura no hablar con nadie, no sabemos qué clase de gente hay aquí.

-Tranquila, cuidare a Niena hasta que bajen. –Respondió Agatha.

Jeska subió las escaleras y Agatha camino al bar, al entrar noto que era un lugar decente, había mesas donde la gente comía, bebía y una escenario donde había una banda tocando, vio que Niena se sentó en la barra, por lo cual la acompaño.

-Debes de estar feliz ahora. –Dijo Agatha.

-Claro, no he ido a un bar en un tiempo. –Dijo Niena.

En eso, ella llamo al cantinero.

-Cantinero, una cerveza para mí y mi amiga.

-No Niena, no me gusta la cerveza, de hecho no me gusta tomar. –Dijo Agatha.

Niena miro a Agatha extrañada y luego dijo al cantinero.

-Bueno, que sean dos para mí y un vaso de agua para la niña.

Agatha suspiro y se dio vuelta para observar el lugar, no había nadie sospechoso pero su mirada se detuvo cuando vio a alguien en una esquina, ese hombre estaba sentado en una mesa, llevaba una gabardina roja, cabello blanco y ojos negros, Agatha se dio cuenta de que era observada por él, por lo cual se dio cuenta y desvió su mirada rápidamente para seguir observando el lugar, al poco tiempo, Jeska y las demás bajaron, por lo cual Niena y Agatha se fueron a una mesa para estar mas cómodas con las demás.

-Bueno, para ser la primera vez que visito un pueblo de los campos externos no está mal. –Dijo Lilica.

-Es porque no ha pasado nada malo por ahora. –Dijo Jeska.

-Que tanto conoces los campos externos?. –Pregunto Isis.

-No mucho, pero lo suficiente como para evitar problemas. –Respondió Jeska.

Jeska y Niena eran las únicas tomando cerveza, las demás tomaban tragos ligeros puesto que no toleraban el sabor de los tragos fuertes.

-No creo que tengamos que preocuparnos aquí, de hecho creo que hay muchos chicos y podemos darnos el gusto de escoger. –Dijo Niena.

-Bromeas verdad?, yo no soy una chica de ese tipo. –Dijo Lilica.

-Mucho menos yo. –Dijo Isis.

-Por los dioses, no saben lo que se pierden al pensar así. –Dijo Niena mientras tomaba un sorbo de su jarro.

De pronto a Niena le llamo la atención algo, luego dijo.

-Agatha creo que tienes un admirador.

Agatha se extraño y pregunto.

-A que te refieres?.

-Ese chico de gabardina roja, ha está mirando hacia esta mesa un largo tiempo. –Dijo Niena.

Agatha miro levemente sobre sus hombros y vio al mismo chico de antes, luego se dio la vuelta y dijo.

-Estas equivocada Niena.

-Bueno, tú te lo pierdes, voy otro trago. –Dijo Niena.

Ella se levanto de la mesa y luego Jeska dijo.

-Tiene razón, el ha estado mirando hacia esta mesa mucho tiempo.

-Crees que sea alguien del imperio?. –Pregunto Lilica.

-No hay forma de saber, pero de cualquier forma, hay que estar alertas. –Dijo Jeska.

Agatha miro su vaso de agua y luego dijo.

-Hay algo en ese chico, que me es familiar… no sé por qué.

-A que te refieres con familiar?. –Pregunto Isis.

Agatha guardo silencio por un momento y dijo.

-Que creo haberlo visto antes.

Al decir esto, se escucho un leve alboroto que provenía de la barra, era entre un hombre ebrio y Niena.

-Que está haciendo una hermosa jovencita como tu aquí?. –Pregunto el tipo totalmente intoxicado por el licor.

-Pues… tratando de pasar un rato agradable y evitando o mejor dicho, ignorando personas como tú. –Dijo Niena.

Ella se alejo de este, pero él la jalo del brazo de regreso hacia él.

-No seas así, tengo mucho dinero, podemos pasar un rato agradable los dos.

Niena lo miro y dijo.

-Si tuvieras veinte años menos y otro tipo de rostro que no sea el de un perro, aceptaría. –Respondió Niena duramente.

Los compañeros del tipo se comenzaron a reír y este dijo.

-Eres una desgraciada.

Justo cuando este la iba a golpear, Jeska detuvo el brazo del hombre.

-La señorita dijo que no quería nada contigo, te recomiendo que lo dejes aquí y te alejes. –Dijo Jeska.

Él le dio una señal al cantinero de que fuera a traer a los guardias del lugar, cuando este se alejo el hombre dijo.

-No dejare que una mujer me diga que hacer.

Los compañeros del hombre se pusieron de pie, era una situación de cuatro contra Jeska, en eso Lilica dijo.

-Creo que vamos a tener problemas.

Agatha se puso de pie y dijo.

-Díganme que ustedes saben luchar cuerpo a cuerpo.

-Yo no. Dijo Lilica con un poco de miedo en su voz.

-Estoy entrenada en el arte de combate sin armas de Phendran. –Dijo Isis.

-Bien… eso bastara. –Dijo Agatha suspirando con un poco de alivio.

El joven que estaba en la mesa de la esquina apretó su puño y dijo.

-Lo arruinaron todo.

Jeska miro fijamente al tipo y le dijo.

-Si quieres problemas, lo tendrás.

Niena tomo rápidamente una botella y se la rompió en la cabeza del hombre que la sujetaba, este cayó al suelo por el golpe, repentinamente sus compañeros saltaron contra Jeska la cual tomo una de las sillas y la utilizo como escudo contra ellos, Isis dio un salto y aterrizo en el pecho de uno de los hombres con una fuerte patada, esos hombres eran rudos y no se daban por vencidos tan fácilmente, Jeska destrozo la silla y uso los restos como armas cortas, Agatha se quedo atrás con Lilica, no sabía mucho acerca de combate cuerpo a cuerpo, pero lo poco que sabía lo utilizaría para proteger a Lilica, de repente, el hombre ebrio se puso de pie y saco un cuchillo.

-Muy bien… ahora les enseñare quien manda a quien.

Las chicas retrocedieron un poco, Niena en sus manos tenía una botella rota, la cual blandió como arma, el tipo comenzó a acerca a Niena, detrás de este había una chimenea con la llama encendida, el hombre en su intoxicación grito.

-Te vas a morir!.

Este cargo contra Niena pero Jeska grito.

-Detente!.

Al decir esto, la llama de la chimenea se propulso como una lanzallamas directo al hombre, cubriéndolo en fuego desde atrás, el hombre grito en agonía mientras que sus amigos lo obligaron a tirarse y rodar por el suelo, el hombre quedo vivo, pero mal herido, los encargados de la seguridad del hotel llegaron y se encargaron de los tipos, la sección del bar donde se llevo la pelea estaba destrozada, al ver esto, el encargado del hotel se dirigió a Agatha y le dijo.

-Lo siento, pero quiero que se vayan del hotel.

En eso Niena dijo.

-Pero si nosotros no hicimos nada!.

Agatha levanto levemente su mano indicando que no había que decir más nada, luego dijo.

-Dejare el dinero para pagar los daños, gracias por su hospitalidad.

Ellas se quedaron en silencio y subieron arriba a buscar sus cosas, al poco tiempo estaban de vuelta en la calle y ya eran cerca de la media noche.

-Bueno, gracias a Niena, nos quedamos en la calle. –Dijo Jeska.

-Oh bien, genial, la culpa es mía, de hecho, porque no me culpan por todo lo malo que pasa en este mundo?. –Dijo Niena.

-Niena, nunca debimos de ir al bar, para próxima, no habrán mas bares. –Dijo Agatha.

-Como sea, si uno no puede hacer lo que quiera simplemente me iré, a ver como rayos piensan salvar al mundo con una menos. –Dijo Niena.

-No digas eso Niena por favor, todos cometemos errores y lo importante es no volverlos a cometer. –Dijo Lilica.

En eso, Niena se paro y camino hacia Lilica y la miro a los ojos desafiante.

-Quien te crees que eres?, mi conciencia?, yo hago lo que me dé la gana. –Dijo Niena.

Lilica se asusto un poco con esa reacción y Isis dijo.

-Ya es suficiente Niena… aléjate de ella.

Niena miro a Isis y suspiro, Agatha bajo la mirada y se apoyo en una puerta cercana, la cual se abrió repentinamente y una mano salió de esta, cubrió la boca de Agatha y la jalo al interior de la casa, Jeska vio como esa acción sucedía rápidamente y grito.

-Agatha!

Ella y el resto de las chicas entraron a la casa, donde se prendió una lámpara dejando ver el interior, Agatha se soltó de su aparente agresor y se dio la vuelta, era el chico de gabardina roja, de cabello blanco y ojos negros, este levanto sus manos y dijo.

-No estoy armado, pero si quieren luchar, adelante.

Las chicas estaban en guardia contra este extraño, pero Agatha dijo.

-Está bien chicas… no nos hará daño.

Jeska se puso al lado de Agatha y pregunto.

-Quien eres?.

-Alguien que en sus ratos libres salva a la gente de su propia estupidez. –Dijo el joven con suma seriedad.

-Me gusta este chico. –Dijo Niena.

Hubo un momento de silencio y Agatha pregunto.

-Porque me trajiste aquí?.

-No solo a ti, a todas, tienen idea de quién era ese tipo?. –Pregunto el joven.

-Un… ebrio?. –Respondió tímidamente Lilica.

El joven suspiro y dijo.

-Es el hermano de un mafioso importante por aquí, ustedes están muertas si no actuó rápido.

-Actuar como?. –Dijo Isis.

El joven sonrió y dijo tras un momento de silencio.

-Soy caza recompensas y me contrataron para matarlo a él y a su hermano.

Todas se sorprendieron y se miraron entre de repente, la puerta se abrió, entro un chico de cabello naranja y ojos negros, vestía de negro y era más joven que el otro.

-Maestro, traigo noticias, en el bar…

El joven se detuvo al ver a las chicas en ese lugar, luego dijo.

-Eh… que sucede aquí maestro?.

-Te lo explico luego, ve y vigila el recinto del objetivo, te encontrare en el callejón. –Dijo el joven de cabello blanco.

-Pero maestro, redoblaron la seguridad desde el incidente del bar, no quiero exponerme mucho. –Dijo aquel chico con un poco de cobardía en su voz.

El otro joven suspiro y dijo.

-Está bien, iremos juntos.

Ambos recogieron sus cosas y se dirigieron a la salida, luego Agatha hablo con él una última vez.

-Espera, eres un caza recompensas, porque nos ayudas?.

El joven se dio vuelta y dijo.

-El que me contrato dijo que si quería recibir una paga completa, me tenía que asegurar que no hubiera ni una sola muerte mas en este pueblo, eso las incluye a ustedes.

El joven de cabello naranja ya estaba afuera, su maestro tomo su espada y antes de salir dijo.

-La casa es de ustedes, pasen la noche aquí… no nos volveremos a ver.

Y así, ambos se fueron y se adentraron en las calles cubiertas de neblina, las chicas se quedaron impresionadas, tratando de comprender lo que había pasado, luego Jeska le pregunto a Agatha.

-Que hacemos ahora?.

Agatha miro a Jeska y luego a las demás, luego suspiro y dijo.

-Traigan algunas cosas de la carreta, pasaremos la noche aquí.

Continuara.